Del latín musculus, un músculo está formado por fibras contráctiles (fibras musculares). Pueden estar relacionados con el esqueleto (los músculos esqueléticos) o formar parte de la estructura de órganos o aparatos (los músculos viscerales).
De acuerdo a su localización, los músculos pueden ser cutáneos (se encuentran inmediatamente debajo de la piel) o profundos (tienen, al menos, una inserción ósea). Según su forma, existen los músculos circulares o esfinerianos y los músculos cuadrados.
El cuerpo humano cuenta con unos 600 músculos de distintos tipos, que se encuentran envueltos por una membrana conocida como aponeurosis. Los músculos son los órganos con mayor adaptabilidad, ya que su forma y contenido pueden modificarse en gran medida.
Los músculos cumplen con varias funciones. Son los encargados de producir movimiento, brindar estabilidad articular, mantener la postura, aportar calor, estimular los vasos sanguíneos e informar sobre el estado fisiológico del cuerpo, entre otras actividades.
De acuerdo a su localización, los músculos pueden ser cutáneos (se encuentran inmediatamente debajo de la piel) o profundos (tienen, al menos, una inserción ósea). Según su forma, existen los músculos circulares o esfinerianos y los músculos cuadrados.
- Músculo liso: se encuentra en la pared de las vísceras y carece de estriación. Sus contracciones son involuntarias, lentas y continuas.
- Músculo cardíaco: se encuentra en las paredes del corazón, es estriado pero de contracción involuntaria y su ritmo es relativamente constante.
- Músculo esquelético: forma parte del aparato locomotor y ancla el esqueleto. Su contracción es voluntaria y da lugar al movimiento.
Los músculos asumen la forma más adecuada a la función que desempeñan, a la forma de los huesos que se insertan, a la fuerza que deben ejercer y a la amplitud de movimiento.
Se diferencian dos partes funcionales en ellos; en el centro presentan un ensanchamiento denominado vientre muscular, tiene la capacidad de distenderse o acortarse, y en los extremos están los tendones musculares, que trasmiten la tracción a los huesos.
Según el ángulo de estriación de las fibras o la relación entre ellas y los tendones, se pueden distinguir:
- Acintados, fusiformes o de fibras paralelas: fibras largas y tendones relativamente cortos. Dan lugar a movimientos extensos pero poco potentes.
- Penniformes: dirección oblicua en las proximidades del tendón. Su forma recuerda a la de una pluma, con el tendón ocupando el lugar del tallo. Son capaces de desarrollar gran fuerza muscular.
-Segmentados: son músculos rectos y su vientre muscular está dividido por tendones.
Los músculos encargados del movimiento se anclan por un lado a un extremo de un hueso y por el otro a un hueso diferente. A estos puntos de anclaje se los denominan inserciones.
Se diferencian dos partes funcionales en ellos; en el centro presentan un ensanchamiento denominado vientre muscular, tiene la capacidad de distenderse o acortarse, y en los extremos están los tendones musculares, que trasmiten la tracción a los huesos.
- Acintados, fusiformes o de fibras paralelas: fibras largas y tendones relativamente cortos. Dan lugar a movimientos extensos pero poco potentes.
- Penniformes: dirección oblicua en las proximidades del tendón. Su forma recuerda a la de una pluma, con el tendón ocupando el lugar del tallo. Son capaces de desarrollar gran fuerza muscular.
-Segmentados: son músculos rectos y su vientre muscular está dividido por tendones.
Los músculos encargados del movimiento se anclan por un lado a un extremo de un hueso y por el otro a un hueso diferente. A estos puntos de anclaje se los denominan inserciones.
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